CICLO DE CINE ITALIANO
Organiza: Colegio de Abogados del Departamento Judicial Mercedes
Coordina: Lic. Carlos María Dieuzeide

ENCUENTRO VIERNES 20 DE OCTUBRE 2023, 19 hs.
Roma città aperta (Roma ciudad abierta). Año 1945.
Dirección: Roberto Rossellini.
Guión: Federico Fellini, Sergio Amidei y Roberto
Rossellini. Historia: Sergio Amidei y Alberto Consiglio.
Música: Renzo Rossellini.
Fotografía: Ubaldo Arata (B&W)
Elenco: Aldo Fabrizi, Anna Magnani, Marcello Pagliero, Maria Michi, Harry Feist, Vito Annichiarico, Francesco Grandjacquet, Giovanna Galletti, Carla Rovere, etc.

Segunda Guerra Mundial. Estando Roma ocupada por los nazis, la temible Gestapo trata de arrestar al ingeniero Manfredi (Marcello Pagliero), un comunista que es el líder del Comité Nacional de Liberación. Pero en la redada Manfredi consigue escapar y pide ayuda a Francesco, un camarada
tipógrafo que en unos días se casará con su novia Pina (Anna Magnani), una viuda con un niño. Además el cura de la parroquia, Don Pietro (Aldo Fabrizi), también apoya la causa e intenta ayudar a Manfredi y los partisanos de la resistencia.

Para Roberto Rossellini, el neorrealismo fue una postura moral antes que un sistema
estético, una manera de expresar con total humildad el sufrimiento del mundo.
Rodada con escasos medios, en un país exangüe que acababa de salir de la guerra, Roma, ciudad abierta se impuso de entrada como un conmovedor testimonio del renacimiento del cine italiano.

NEORREALISMO ITALIANO:
El término “neorrealismo” fue acuñado en 1943 por un crítico y guionista italiano, Umberto Bárbaro, para designar un modo de hacer cine -más que una escuela- que se desarrollará en Italia inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, a la vez como reacción contra el cine académico y anquilosado del fascismo y con el fin de describir la sociedad italiana traumatizada por veinte años de ese régimen.
El Centro Sperimentale di Roma, fundado en 1935 por Luigi Chiarini, donde se agruparon algunos jóvenes críticos y cineastas hostiles al régimen, fue el crisol de esta revolución que se oponía al universo ficticio de los estudios, a la dramatización exagerada, al “caligrafismo” y preconizaba como contrapartida una
mayor atención dedicada a la vida cotidiana.
El neorrealismo se propone como una actitud generosa, inconformista, preocupada por el testimonio social. Según el teórico de este movimiento Cesare Zavattini (1902-1989), el cine debía interesarse por “el hombre en su aventura cotidiana”.
El primer gran film neorrealista fue Ossessione del año 1942, dirigido por Luchino Visconti. Pero fue sobre todo Roma citta aperta la que por su sobriedad y su inserción en una colectividad real se convirtió en la verdadera opera prima de la explosión neorrealista.
Otros títulos fundantes del neorrealismo fueron Ossessione (Visconti, 1942), La terra trema (también de Visconti, 1948), Ladri di biciclette (de Sica, 1948), etc.
Sobre las ruinas de la guerra se edifica poco a poco un nuevo cine, humano, dirigido a la gente y a su cotidianeidad.
No hubo UN neorrealismo. La diversidad de tendencias en su seno fue determinante para su multiforme vitalidad.

PRÓXIMOS ENCUENTROS:
Noviembre:
-Viernes 3: El jardín de los Finzi-Contini (Il giardino dei Finzi-Contini -1971-).
Dir.: Vittorio De Sica. Con Fabio Testi y Dominique Sanda.
-Viernes 17: Divorcio a la italiana (Divorzio all’italiana -1961-).
Dir.: Pietro Germi. Con Stefania Sandrelli y Marcello Mastroianni.

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Fuente: CADJMercedes

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